Que hay demasiados post-it en la nevera, o demasiada gente llamándote al teléfono a la vez. Que todo el mundo va muy deprisa, y tu tal vez, demasiado despacio. Que todo el mundo ya te ha encontrado cuando tú todavía te estás buscando. O quizá que hay demasiado ruido ahí afuera, y tú solo pretendes tumbarte un rato en tu cama y escuchar tus canciones preferidas. Demasiados deberes, poco tiempo. Que todo el mundo te habla de algún mismo tema, y tú no quieres saber nada de él, porque son solo tus asuntos.
O solo el hecho de ver que te quieren demasiado y tu no eres capaz de querer con la misma intensidad.